Como cuando un fin de semana las cosas fluyen simplemente entre la compañía que más te apetecía o entre la gente que en esos momentos necesitas.
Y sin mirar más allá, hoy descubres que tras la lluvia vuelve el sol, que siempre apetece que te vuelva a calentar.
...porque hacía mucho que no me dejaba pasar tiempo conmigo misma...
No hay comentarios:
Publicar un comentario